miércoles, 2 de julio de 2014

Pensando en ti a medianoche de un martes


A él le gusta que le hable bonito de noche y de día,
yo le digo que no joda tanto, que se apure con la bebida.
Pero voy arrepentida y le escribo un poema,
dice que está ocupado.
Lo amo.

Viene con insomnio y le beso el cuello,
para no dejarlo dormir,
le consiento las ocurrencias,
le rozo la espalda desnuda.
Sin especificar quién lo está.
Me ama.

Y entonces llega y me tira del camisón,
me jala lento hacia él y me besa la frente.
Actuamos como si supiésemos dormir juntos.
Pero no sabemos,
nos volteamos a media noche para abrazar almohadas.
Nos amamos.

Se hace difícil.
Y si no fuese tan intenso,
no me sentiría tan drogada.
Si fuese sencillo no sabría apreciar y apretarte bien cerca de mí,
¿Me amas? Yo te amo, contéstame, bobo
¿Crees tú que nos amamos?